El aire la vela, vela. El aire la está velando

El aire la vela, vela. El aire la está velando
Parecen dormidas en el pajonal... pero no lo están.

11 may 2013

El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona.

La vida es hermosa con ustedes, mis amigos. Ahora me acuerdo que hace mucho -en los tiempos en que se escribían cartas, ¡oh maravilla!- había buzones rojos en casi todas las esquinas.

Ya en sí un buzón rojo era un objeto que me agradaba mucho. Me hubiera gustado vivir al menos por un día adentro de un buzón. Pero lo importante eran las voces que salían de adentro de ese objeto: declaraciones urgentísimas de amor, confesiones privadas, alegrías que trepaban al cielo azul, más documentos oficiales que hablaban con voz de policía.  

A mí me parecía oír todo eso al pasar, y con sólo ver un buzón de vez en cuando, me alcanzaba para fantasear algunas semanas.  

Lo mismo me pasa con las voces de ustedes que, sin embargo, llegan mucho mejor pronunciadas, llegan claras y me llenan de chocolates y confites. No importa si les gusta o no mi escrito, para mí todo viene con vuestras mieles.

Y en las respuestas a estos últimos posts he gozado con ganas. Las discusiones más fructíferas son las que, desde lejos, pueden mirarse como banales. ¿Discutir que si un título se ajusta o no a lo escrito? ¿Que lujuria es esto y no aquello?

No hay comentarios: