25 nov 2012
Te extrañaremos
Lo hago siempre de ese modo también, y mis relatos, si bien no son “prosa poética”, vuelan alto, muy alto, hacia las esferas celestiales -las esferas celestiales no sólo pertenecen a los místicos y a los músicos sublimes sino también a los poetas -55 es la música en los números de los sueños; 56 es la caída. ¿Pero hacia donde caigo si siempre caí?¿Es que el año pasado me detuvo la música?
Nací en el año 1996 de “la carne fui la niña bonita y la desgracia. Si fueras un círculo, vida, y otra vez fuera aquello pediría a los dioses de todas las loterías y de todos los sueños algún número que no figure en la tabla el del espíritu que sin ojos ve y canta sin boca ni palabras.
Pero estoy en un momento detenido. La primavera vino con todas las mariposas y las flores y no me despertó Pido colaboración: traigan poemas a esta fiesta.
Yo sólo puedo darles hoy el recorte de una novela, el comienzo de hace unos años de una novela que se sitúa en el siglo pasado, y en el anterior…
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